Brad Pitt padece desde hace años prosopagnosia, una rara enfermedad que consiste en la imposibilidad de reconocer los rostros de las personas. Así lo anunció él mismo en una entrevista publicada en Esquire en 2013, en la que mencionó de pasada que, en su caso, podría haber aparecido a causa del consumo de drogas. Este trastorno, en concreto, es un tipo de agnosia visual que se produce por una especie de desconexión entre la vista y el crebro.
Los ojos funcionan correctamente y pueden distinguir las diferentes partes de la cara (nariz, pelo, boca...), de manera que el afectado ve los rasgos a la perfección, pero no es capaz de identificar de quién se trata.
"Hay muchas personas que me odian porque creen que les falto el respeto", contaba el actor al mismo medio. Una situación que le llevó a plantearse una solución a la desesperada. "Durante un año le preguntaba a la gente dónde nos habíamos conocido, pero todo empeoró. Las personas se ofendían más y más". De acuerdo con sus declaraciones, la gente llegó a tacharle de ególatra y vanidoso.
En los estadios más graves de la enfermedad, el afectado es incapaz de reconocerse en un espejo o en una fotografía. En la actualidad, no existe un tratamiento, aunque se llevan a cabo diferentes terapias enfocadas al reconocimiento, por ejemplo a través de estrategias auditivas como la voz o características únicas como una cicatriz o la barba.
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